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La caña telescópica blanca GHOTDA 2,1-3,6 m está diseñada para pescadores que buscan un equipo versátil, resistente y fácil de transportar para sus jornadas en ríos, lagos y determinadas situaciones de costa ligera. Su construcción combina un 80% de FRP con un 20% de fibra de carbono, logrando una acción dura y una buena reserva de potencia sin renunciar a una estructura relativamente ligera para tratarse de una caña telescópica.
Esta caña es adecuada tanto para pescadores que se inician en la pesca desde orilla como para usuarios más experimentados que desean una caña robusta para pesca recreativa, ya sea en escenarios de agua dulce o cerca de la costa. El diseño blanco con detalles cuidados aporta un aspecto moderno y llamativo que se diferencia de las cañas tradicionales de tonos oscuros.
El blank se compone mayoritariamente de FRP (fibra de vidrio reforzada con plástico) complementado con un porcentaje de fibra de carbono. Esta combinación ofrece la robustez y tolerancia al maltrato típica del FRP, junto con un extra de rigidez y respuesta gracias al carbono. El resultado es una caña de tonalidad dura, capaz de manejar pesos de pesca considerables y trabajar peces de buen tamaño sin perder estabilidad.
La acción dura es especialmente interesante cuando se pesca en zonas con obstáculos, piedras, estructuras artificiales o vegetación abundante, donde es necesario ejercer presión sobre el pez para evitar que se refugie en lugares complicados. Al mismo tiempo, la construcción telescópica permite que la caña se pliegue a una longitud contenida, facilitando el transporte en coche, transporte público o incluso a pie.
La serie se presenta en varias longitudes nominales: 2,1 m, 2,4 m, 2,7 m, 3,0 m y 3,6 m. Cada una de estas medidas cuenta con una longitud real ligeramente diferente, que suele situarse en torno a 1,95 m para el modelo de 2,1 m, 2,37 m para el de 2,4 m, 2,62 m para el de 2,7 m, 2,95 m para el de 3,0 m y aproximadamente 3,20 m para el modelo de 3,6 m. Estas longitudes reales permiten optimizar la curva de trabajo de la caña y adaptarla a diferentes estilos de lance.
Las tallas más cortas se adaptan muy bien a ríos pequeños, canales y escenarios con poco espacio para lanzar, mientras que las longitudes mayores ofrecen mayor alcance en embalses, lagos amplios y playas donde conviene lanzar el montaje más lejos de la orilla. La caña está pensada para montajes de pesca con flotador, cebos naturales o incluso determinados montajes de fondo ligeros, siempre en consonancia con la potencia del blank.
Las anillas de gran diámetro con interior cerámico y armazón de acero inoxidable están diseñadas para reducir la fricción de la línea y mejorar la salida durante el lance. Su construcción sólida y la soldadura de una sola pieza aportan resistencia y estabilidad, lo que se traduce en un mejor rendimiento cuando se utilizan líneas de mayor diámetro o trenzados.
El asiento de carrete reforzado permite fijar el carrete de forma firme y segura, evitando holguras y movimientos indeseados durante la acción de pesca. Esto es especialmente importante al trabajar peces potentes, donde las tensiones sobre la unión caña-carrete se intensifican. El mango de espuma ofrece una sujeción cómoda, con diseño pensado para absorber el sudor y mejorar la ergonomía en combates prolongados, reduciendo la fatiga en la mano.
Esta caña telescópica blanca GHOTDA está orientada principalmente a la pesca desde orilla. En agua dulce, se desempeña muy bien en embalses, ríos grandes y lagos donde es necesario alcanzar distancias moderadas. Resulta adecuada para pescar carpas, barbos y otros ciprínidos de tamaño medio y grande, así como para especies depredadoras cuando se emplean montajes de cebo natural o ciertos señuelos pesados.
En entornos de costa ligera, puede utilizarse para pescar desde espigones o playas en busca de especies costeras de tamaño medio, siempre que se empleen pesos de montaje acordes al rango de potencia de la caña. Su robustez y acción dura permiten manejar plomos y cebos relativamente pesados sin que la caña se sienta sobrecargada.
Una de las principales ventajas de este modelo es su diseño telescópico, que permite plegar la caña a una longitud reducida para guardarla y transportarla con comodidad. A diferencia de las cañas de varias secciones tradicionales, las telescópicas pueden caber en espacios más pequeños, como el interior de un maletero sin necesidad de abatir asientos o en compartimentos de almacenamiento limitados.
Su construcción en FRP y carbono aporta la robustez necesaria para soportar golpes ocasionales, apoyar la caña en piedras o estructuras y soportar el trato propio de las jornadas intensivas de pesca recreativa. Esto la convierte en una buena opción como caña de batalla, lista para acompañarte en salidas frecuentes sin necesidad de excesivas precauciones.
Para garantizar una vida útil prolongada, es recomendable desplegar y plegar los tramos de la caña con movimientos rectos, evitando forzar las secciones o realizar giros incómodos. Mantener limpios los encajes entre tramos ayuda a prevenir ruidos, holguras y desgaste prematuro. Tras cada sesión de pesca, especialmente si se ha utilizado en condiciones de barro, arena o salinidad, conviene limpiar la caña con un paño húmedo y dejarla secar completamente antes de guardarla.
Cuando se utilice en mar o entornos salinos, un enjuague con agua dulce resulta fundamental para eliminar restos de sal que puedan acumularse en las anillas, el asiento de carrete y los encajes telescópicos. Este sencillo mantenimiento reduce la posibilidad de corrosión y contribuye a que la caña mantenga su aspecto y funcionamiento óptimos durante más tiempo.
En resumen, la caña telescópica blanca GHOTDA 2,1-3,6 m es una opción muy interesante para quienes buscan una caña resistente, fácil de transportar y preparada para afrontar una gran variedad de situaciones de pesca. Su acción dura, su construcción robusta y su diseño cuidado la convierten en una compañera fiable para tus jornadas junto al agua.
















